La distancia de transmisión comunicada es una distancia en campo abierto según criterios normalizados específicos exentos de perturbaciones (se mide siempre en laboratorio). Esta distancia puede resultar alterada por algunos fenómenos como, por ejemplo, paredes gruesas y/o con estructura metálica, fenómenos parásitos (otros dispositivos de radiofrecuencia, cables de 230 V, dispositivos Wi-Fi). Por lo tanto, es difícil evaluar esta distancia según la situación de cada uno de los clientes. Por ejemplo:
1) Con una pared de hormigón, la señal pierde entre el 50 y el 80 % de su potencia.
2) Con una pared de piedra, la señal pierde entre el 30 y el 50 % de su potencia.
3) Con un tabique de cartón yeso, la señal pierde entre el 30 y el 40 % de su potencia.
Existe, sin embargo, un amplificador de antena que permite mejorar la radiotransmisión.